Lima, Perú PERUBASKET - Cómo era de esperarse, conocida la decisión de FIBA y luego del informe del Grupo de Trabajo, y habiendo trascendido declaraciones del Sr. Charles Cannock en redes sociales donde, con su peculiar tartamudeo, intenta sorprender a jugadores e instituciones, invitando a formar parte de una asociación privada, las ligas de base no tardaron en pronunciarse y remitieron una carta al IPD, en la que no solo marcan distancia con la iniciativa del directivo del Club Regatas Lima y su curiosa propaganda asociativa, sino que también le dejan clara al IPD su posición sobre diversos puntos.
La carta habla por sí sola. Para empezar las ligas reafirman con claridad su rechazo a Duarte y lo identifican como el gran responsable de la desafiliación del Perú del circuito internacional, ello por la necedad en insistir en sus bloqueos registrales.
Luego, manifiestan su rechazo sobre lo que a todas luces sería una estrategia Duarte-Cannock que buscó minar “desde dentro” a la FDPB indisponiéndola con FIBA al evitar las elecciones vía bloqueos registrales, con la finalidad que eso les genere una mejor posición para intentar crear una organización paralela, situación que denuncian y que no van a permitir.
Asimismo, reconocen que el “modus operandi” de Duarte y compañía es el manejo de influencias, la búsqueda de presiones para intentar obligar a las organizaciones públicas (léase IPD) a que tomen decisiones que les son convenientes (los primeros tres grupos de trabajo de la gestión Fernández son el mejor ejemplo de ello, pero hay muchos más) y le advierten al IPD que, en esa línea de conducta lo lógico (lo que dice el manual de los “hijitos de papá”) es mensajear a los amigos para ver “quien tiene un conocido en” que le permita presionar a la presidencia del Instituto Peruano del Deporte. Las ligas de base le cantan clarito a San Martín que, si ya no fueron a presionarlo, no tardan en llegar.
Y por si su postura no fuera clara, reiteran su respaldo al Grupo de Trabajo vigente, exigiéndole al IPD que no realice cambios hasta que este se inscriba en los Registros Públicos (más aún si falta tan poco tiempo para lograrlo) y pueda realizar el proceso electoral en su institución, la FDPB, posibilidad que les ha sido negada desde hace dos años por la fina cortesía de Ricardo Duarte y sus títulos caducos.
La misiva al IPD es un reclamo social que realizan las bases de la organización, un relato de como estos abusos programados desde un gabinete es una película que se repite a lo largo de los años, donde solamente cambian los nombres de los “amiguísimos”. Los dirigentes, que son los que representan a las organizaciones de base, representantes electos de quienes practican el deporte y, en última instancia y según la ley, quienes integran la Asamblea de la Federación, identifican, rechazan y están cansados de este tipo de maniobras, pero sobre todo, no están dispuestos a permitir que se vulneren sus derechos, y que personas sin representación, quieran imponer su voluntad en detrimento de la de las bases.
El fenómeno político peruano visto en las recientes elecciones presidenciales, en opinión de los expertos responde a diversas miradas y perspectivas, pero una en la que todos coinciden es que existe un hartazgo por parte de aquellos a quienes el sistema centralista y de las influencias siempre ha perjudicado, ese sistema del que tanto y tantas veces, durante más de 10 años, hemos escrito en este portal, y que, quizás a diferencia de otras áreas de la vida del país donde es más difuso, en nuestro deporte, se nota con tanta claridad. Ese sistema que, en última instancia, quizás sea el principal problema del basketball peruano.
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